RISOTERAPIA,
ESA GRAN DESCONOCIDA
Te presento a Risoterapia,
yo la considero como la propia vida, que no es para explicarla, ni pensarla…es
para experimentarla, para sentirla.
Te invito a que te
imagines que estamos de frente tú y yo, ¿ya?...pues ahora preciso que me mires
a los ojos, los ojos son el balconcito por donde se asoma nuestro corazón. Nos
desconectamos unos de los otros al no mirarnos; cuando yo te miro te veo, te
siento como el corazón que eres y me veo reflejada en ti…
Mis Talleres y Conferencias
de Risoterapia los comienzo tomando conciencia de nosotros mismos, de nuestro
silencio interior…Te invito a que lo hagamos, cierra tus ojos y lleva tu
atención a tu respiración…siente el suave movimiento de tu tórax y tu abdomen
con cada inspiración y expiración…permítete sentir, escuchar tu
interior...Cuando estés sintonizad@ contigo mism@ vuelve a estas líneas.
Parece incoherente
¿verdad? que una Conferencia-Taller sobre Risoterapia se comience tomando
contacto con nuestro silencio interior.
Yo siento que el cuerpo es un templo sagrado,
y que yo sepa, en todos los templos sagrados el silencio y el recogimiento son
parte inherente a ellos. Los sonidos que se suelen escuchar en los templos son
los cánticos o rezos y los instrumentos que se suelan utilizar. Pero este
templo sagrado nuestro tiene una azotea muy ruidosa, una azotea donde vive una
vecina que yo la llamo la “rayá”…La “rayá” hace tanto ruido que impide que el
silencio se instale para poder permitirnos que nuestra música se exprese. Esta
“vecina” distrae mucho, tanto que las músicas que del templo sagrado han de
salir no se dan.
Yo defino la risa como la divina música del espíritu, luego es
preciso callar un poco a la “rayá” para manifestar nuestra música interior,
para poder sacarla fuera. Como dice Wayne Dyer: “No te mueras sin haber sacado
afuera tu música”…y que yo entiendo que no es solamente la risa, sino toda esa
sinfonía que podemos transmitir cuando desplegamos nuestro potencial como seres humanos y
divinos.
Durante la Conferencia-Taller
continúo con más toma de conciencia, algo en lo que generalmente no reparamos,
¿qué-quién soy?. Y les invito a realizar un maravilloso viaje, un viaje que va
de la mente al corazón…de la azotea al sagrario de nuestro templo sagrado, poniendo
a nuestra vecina la “rayá” de nuestra parte.
En Risoterapia le damos
más relevancia al hemisferio cerebral derecho, a la mente creativa, intuitiva,
amorosa, espontánea, esa que está deseando de dar lo mejor de cada uno de
nosotros; ya que en la sociedad que vivimos nos empuja a utilizar mucho más el
izquierdo, la mente racional y analítica…tratando de gestionar las
autolimitaciones que con la mente creamos. En todo caso la mente al servicio
del corazón. Por eso Risoterapia es de suma seriedad.
Risoterapia,
esa gran desconocida…así he titulado a este compartir
porque realmente es lo que percibo; existe una gran desinformación al respecto,
tanto a niveles históricos como científicos.
Hay personas que cuando les
planteas hacer un Taller de Risoterapia te dicen: “No, si yo ya me río un
montón”. Y en Risoterapia no sólo nos reímos, que mucho también, sino que
recuperamos la memoria…hay mucho más “Alzheimer” del que nos imaginamos. Un
“Alzheimer” que nos hace olvidarnos de todo nuestro potencial como seres humanos
y divinos…Con Risoterapia logramos recuperar esa memoria intrínseca logrando un
re-encuentro con nosotros mismos.
Una de las herramienta
que utilizamos en Risoterapia es evidentemente la risa con su cantidad de
beneficios…Cuando reímos se pone en marcha toda una farmacia natural interna…
Además de las dinámicas para provocar
la risa, incido mucho en el contacto físico, los abrazos, los masajes, las
caricias. Son muchos los prejuicios y perjuicios que llevan a las personas a no
tocarse y es parte del alimento del ser humano, está comprobado
científicamente. Por un lado está nuestra piel, que es el órgano más grande de
nuestro cuerpo y por otro, nuestras manos que yo considero que son las alas de
nuestro corazón y que están para transmitir amor, ese amor que somos que
precisamos sentir.
Y soltamos también tensiones, cargas,
rabias a través de dinámicas específicas para ello; además de la risa, el baile
que hace que se distienda la persona….que se libere poco a poco de la coraza
que lleva puesta. Por cierto, los rostros varían mucho de cuando se llega a
cuando se termina el Taller.
La mirada directa es una constante en
mis Talleres, me encanta mirar a los ojos y provoco a que lo hagan, es una
manera de que la persona te preste atención, que se sienta a su vez atendida e
importante…y sobre todo, porque entiendo que son los ojos los balconcitos por
donde el corazón se muestra y así,
mirándonos a los ojos, podemos sentirnos.
¡¡Y cómo no, sacamos a pasear, a jugar
a nuestr@ niñ@ interior. Ahí ya el gozo es enorme cuando ves a los adultos
jugar, con esos rostros y ojos iluminados. Me encanta, me encanta provocar
todas esas vivencias en las personas, verles disfrutar, sentirles, observar
como dejan caer las corazas y se muestran tal cual, en esencia!!.
En el trabajo que realizo con las
personas durante los Talleres es curioso observar el afán que tenemos por
buscar fuera lo que ya tenemos dentro, el afán por demandar al otro que nos dé,
sin ni siquiera atrevernos a dar…tal es la coraza que nos ponemos. Y resulta
que lo tenemos todo dentro, esperando que lo redescubramos y lo compartamos…no
hay que esperar que nos den, se trata de dar…es una retroalimentación, das y te
viene de vuelta multiplicado. Por eso lo de:”Feliz-si-das, FELICIDAD”.
Otra observación es el sentimiento de
soledad que existe en muchas personas, no tienen conciencia de la Totalidad a
la que pertenecen, del Holograma al que pertenecemos, de lo interconectados que
estamos los unos con los otros, del cómo cada pensamiento, cada actitud tiene
repercusión en el resto de personas. Y
es a través de divertidas dinámicas que se dan cuenta de ello. Para el ser
humano es muy importante sentir que pertenece al grupo, al sistema, por ello
mismo aplico varias actividades para provocar la cohesión grupal y el
sentimiento de pertenencia al grupo.
¿A quiénes va dirigida
Risoterapia?. A personas de cualquier edad, a todo
tipo de colectivo, no excluye nada, ni sexo, ni ideales políticos, ni
religiosos, nada…Allí donde exista un corazón, allí se puede REÍR Y CRECER.
Yo comencé, y con ello continúo, impartiendo
Talleres de Relajación, Educación Bio-Emocional y Crecimiento Personal, pero
cuando llegó a mí Risoterapia descubrí una herramienta valiosísima para
personas que, de algún modo, ponen más resistencia a entrar en su interior y hoy
aplico lo que he denominado el Sistema R.A.R. Risoterapia, Amor y Relajación
fusionados, así se facilita el entrar en nuestro interior y poder desplegar
todo nuestro potencial humano y divino.
Mi labor es compartir no sólo lo que
he aprendido, experimentado e integrado a lo largo de estos años, sino dar
testimonio con mi BienEstar de que se puede vivir de manera más saludable y
plena, como yo digo VIVIR en mayúsculas.
Risoterapia yo la defino como una
medicina para nuestro físico, psique, emociones y espíritu, sin contraindicaciones
y sin peligro de intoxicación por sobredosis.
Risoterapia, como os comentaba al
principio, es como la vida misma, está hecha para ser sentida no para ser
pensada ni explicada…por eso hasta que no se experimenta, claro, no se conoce
Risoterapia…es ahí cuando deja de ser la gran desconocida para pasar a ser la
gran aliada.
Reyes Elías Barrero
Que lastima que vivo tan lejos Yeyii!!!! soy normi lacc
ResponderEliminarBuenas tardes con alegRÍA querida Normi!!
EliminarOjalá hubiese menos distancia sí...aún así puedes incorporar cositas como practicar la mirada directa, la respiración consciente, el reír ante el espejo de vez en cuando, abrazar...!!
Cálidos abrazos cielo!!